Reproduzimos abaixo o artigo da Tendência Militante Bolchevique da Argentina chamando os trabalhadores a constituir uma oposição proletária de esquerda contra a direita macrista e o novo governo capitalista de Alberto Fernandez, a partir da autoridade dos que estiveram junto com as massas nas lutas de rua e na derrota eleitoral do macrismo .
Los ganadores del ajuste que esta impulsando Fernández, por ahora, son los tenedores de títulos de deuda en pesos cuyo calendario de pago se cumple rigurosamente. Hay perdedores en la burguesía agroexportadora – por los impuestos que puso, las llamadas “retenciones” clave para obtener los dólares que le permitan cumplir con el pago de la deuda. Así y todo, el nuevo gobierno puso un régimen de segmentación y compensaciones para los “pequeños productores” es decir la clase media rural.
También pierde la clase media por impuestos a los bienes personales, el impuesto a la compra en moneda extranjera – en Argentina ahorra en buena medida en dólares – y por la reforma previsional en donde se erosiona más a los peldaños más altos de la pirámide previsional – si bien se da un aumento excepcional a los más bajos. Como contratendencia hay algunas medidas que aligeran el peso de los créditos hipotecarios que benefician a sectores medios endeudados por la cuestión de la vivienda. Así como anunciaron hacia marzo un aumento general del conjunto de las jubilaciones.
Hay que decir que los impuestos puestos a la agroexportación cumplen la función de hacerse de dólares por parte del tesoro nacional como una forma de garantizar el pago de deuda. En un contexto en donde la deuda de conjunto con el FMI apunta a ser pagada en su totalidad y la negociación apunta a dilatar vencimientos También los intereses de los bancos y los monopolios privados de los servicios estratégicos no fueron afectados.
También en relaciona la reforma previsional se eliminó la movilidad automática, a partir de ahora por 6 meses se elevaran por decreto cuyos porcentajes no podemos prever.
En las tendencias a la renegociación de la deuda el FMI sigue conserva su rol de acreedor privilegiado. El gobierno de Alberto Fernandez no habiendo cuestionado el endeudamiento que género el macrismo apunta a grandes rasgos a un ajuste que le permita negociar a la vez que cumplir en mejores condiciones con los acreedores de la deuda externa. En ese sentido es consecuente con el kichenerismo que en sus gobiernos se jactaba de ser pagadores seriales.
Todo lo anterior no niega si no que encuadra las concesiones sociales que puedo haber hecho Alberto Fernandez como la tarjeta alimentaria o la doble indemnización por despido por los próximos 6 meses. Medidas que en el fondo son válvulas de escape a la presión social.
La victoria de Alberto Fernandez fue una ligera derrota de la ofensiva que a nivel continental es Bolsonaro en Brasil quien mejor representa. Ahora la tarea de la clase trabajadora es avanzar en la oposición obrera al plan de ajuste que impulsa el propio Alberto Fernandez.
Es necesario que los trabadores empiecen a organizarse para enfrentar al ajuste de Alberto Fernandez con el fin de “cumplir” en las mejores condiciones posibles para un gobierno burgués con el grado de endeudamiento del estado capitalista, es decir descargándolo sobre los trabajadores mismos.
